El PSOE pide a Botella que desmantele la depuradora de La China

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El grupo Socialista en el Ayuntamiento de Madrid ha reclamado hoy al gobierno local el desmantelamiento de la planta depuradora La China, la más vieja de Madrid, para que el terreno que ocupa se convierta en una zona verde que amplíe el Parque Lineal del Manzanares. La petición ha sido formulada este mediodía por el portavoz del grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzky, durante una visita que ha realizado a la zona y durante la cual ha recordado los malos olores y la contaminación que desprende la depuradora y que sufren unos 300.000 vecinos de Usera, Villaverde y Puente de Vallecas. Lissavetzky ha insistido en que esta depuradora «no se ajusta a la normativa europea» y que su desmantelamiento ya estaba previsto hace ocho años en un convenio firmado entre el Ministerio de Medioambiente y el Ayuntamiento de Madrid. El portavoz socialista ha lamentado que siempre sean «los barrios que mayor desequilibrio soportan los que, además, sufren los problemas derivados de la falta de adecuación tecnológica». En su opinión, la alcaldesa, Ana Botella, dice que la capital es un referente en innovación y tecnología porque los ciudadanos pagan impuestos por Internet o el aparcamiento por teléfono móvil, «pero la realidad se ve y se huele en instalaciones como La China, una instalación obsoleta que produce un perjuicio diario a los vecinos». «La gestión del problema de olores en La China representa el Madrid de Ana Botella en estado puro», ha dicho Lissavetzky, quien ha añadido que «una ciudad inteligente es aquella que mejora la calidad de vida de sus ciudadanos, más allá de que se le facilite el pago de tributos». Según el Grupo Socialista, los 337.000 kilos de fango que genera cada día la depuradora son los responsables de los malos olores que soportan a diario unos 300.000 vecinos, especialmente durante la tarde y la noche. En septiembre de 2009, el Ministerio de Medio Ambiente y el Ayuntamiento madrileño suscribieron un acuerdo para desmantelar la estación regeneradora de aguas residuales de La China. El País – EFE